“Desde el Gobierno regional, le solicitamos a la ministro de la Defensa, ordene que los oficiales Richard Rodríguez de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y Octavio Urosa de la Aviación, sean regresados a sus comandos naturales y salgan del estado Lara, ya que están causando terror dentro de la población. Igualmente pedimos al ministro de Interior, Justicia y Paz, Miguel Rodríguez Torres, que el comisionado Argenis Colmenares, quien fue director de la PNB, y ha sido observado con este grupo de motorizados, sea retirado del estado Lara”.
Tales aseveraciones las hizo el secretario general de Gobierno, Teodoro Campos, quien acusó a tres funcionarios de seguridad de la entidad, de comandar los grupos de motorizados, que a su juicio causan terrorismo en la población, junto a un ex-concejal adepto al oficialismo.
“Al final de la avenida La Mata de Cabudare, dos efectivos de Polilara a bordo de dos vehículos, le dieron la voz de alto a este grupo que había sido denunciado por los vecinos, entre quienes se identificaron estaba el capitán de la Guardia Nacional Bolivariana, Richard Rodríguez, el oficial de la Aviación, Octavio Urosa (ex-director de Emergencias Lara 171) y un miembro del Partido Socialista Unido de Venezuela, ex-concejal de Iribarren, Gabriel Guerrero”.
Narró que los motorizados manifestaron que estaban haciendo un recorrido por el sector, “se le informó al comando de la Guarnición Militar, quienes tienen la notificación de esto, sin embargo, se les hizo seguimiento hasta que se retiraron del municipio”.
Para el secretario general de Gobierno, llama poderosamente la atención que un civil como Guerrero, se encuentre ligado entre los funcionarios de la guardia, y más aún si están comandándolos.
“Solicitamos a la fiscalía militar inicie una investigación para que aclare lo ocurrido. ¿Por qué miembros de bandas armadas se escudan detrás de vehículos militares blindados?”
Campos aclaró que junto a los motorizados interceptados, se encontraba otro grupo que al momento de dar la voz de alto se dieron a la fuga por lo cual los uniformados de la policía regional tenían dos opciones: perseguir a los que huyeron o investigar a los interceptados.
“No se detuvieron porque son funcionarios con permiso para portar armas. Gabriel Guerrero no portaba”.
También denunció que este grupo de personas tiene como base un centro asistencial, lo cual viola todas las normas de derecho internacional.
“No pueden utilizar estas instalaciones como escudo. Desde la Gobernación insistimos en el diálogo y tener orden en el estado”.
De igual manera invitó a la directiva de la tolda roja a mantener en paz el estado Lara:
“Recojan a sus miembros violentos. No creemos que los problemas de la región se resuelvan con grupos armados”.
Ante la interrogante de por qué a funcionarios de Polilara se les ha visto junto a los de la GNB, dijo que les solicitaron el apoyo de algunos motorizados, pero cuando las autoridades se dieron cuenta que los ligaron y supieron de las acciones, los retiraron inmediatamente.
Por otra parte mostró su preocupación por los daños causados en algunos conjuntos residenciales al este, oeste y norte de Barquisimeto, así como también en el municipio Palavecino.
Escrito por Carlos Iván Suárez Fotos: Ángel Zambrano
febrero 25, 2014. El Impulso