Resistencia consolidada

Resistencia consolidada

A pesar de la represión, los venezolanos demócratas hemos resistido durante doce años


RUTH CAPRILES | EL UNIVERSAL

jueves 11 de noviembre de 2010 12:00 AM

Es preciso unir las cabezas y la información para resistir de forma racional y coordinada los efectos destructivos de la psicopatía política. Hasta ahora, los primeros cientos de miles de damnificados, que en realidad somos millones, o todos los venezolanos, han acusado el pillaje y la represión oficial en solitario. Incluso aquellos que han pertenecido a asociaciones gremiales u otras que podrían defenderlos, o la sociedad civil que se ha organizado, apenas hemos podido emitir protestas innumerables en forma de comunicados o convocatorias a marchas en rechazo o apoyo que mueren allí porque al día siguiente hay una nueva agresión gubernamental, otro despojo, otra amenaza a nuestros derechos fundamentales y no tenemos tiempo para atender ni fuerza para revertir los efectos letales de la acción oficial. Ante el poder despiadado de un psicópata, estamos impotentes. Nuestras voces se han levantado protestando por esto o aquello y, a pesar de la represión, los venezolanos demócratas hemos resistido durante doce años, pero también hemos perdido espacio y esperanza en cada oportunidad. Los presos políticos languidecen en las cárceles, los sindicalistas caen abaleados, los agricultores y ganaderos pierden sus tierras productivas, los empresarios pierden sus fábricas y depósitos; y ahora ha empezado el despojo de viviendas. El país entero pierde sus fuentes de alimentación y sus activos para que el Gobierno pueda financiar la destrucción. Sí, hemos resistido dignamente, pero no es suficiente. Tenemos que consolidar la resistencia. No es sólo convocar a una marcha o manifestación. Es necesario empezar por consolidar la información. Cuántos presos políticos, sindicalistas muertos, tierras y propiedades confiscadas o invadidas, empresas quebradas, personas despedidas. Luego, necesitamos coordinar las protestas. Tenemos que hacernos solidarios con cada agravio y que la resistencia sea nacional, coordinada, progresiva. La Mesa de la Unidad ha demostrado lo obvio: en la unión está la fuerza.

ruthcapriles@yahoo.com jueves 11 de noviembre de 2010 12:00 AM

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